Es frecuente que las personas que padecen un trastorno bipolar, puedan además sufrir algún otro trastorno mental. Se calcula que dos terceras partes de las personas que sufren trastorno bipolar van a sufrir además algún otro tipo de trastorno, que se conoce como comórbido o concurrente. De entre ellos destacan sobretodo los trastornos por usos de substancias, es decir, las adicciones (alcohol, cocaína u otras substancias) que aparecen en aproximadamente la mitad de los pacientes con trastorno bipolar.
También son bastante frecuentes los trastornos de ansiedad concurrentes, es decir que una persona con trastorno bipolar puede además sufrir un trastorno de ansiedad específico en algunos momentos de la evolución, incluso es posible combinar estos dos trastornos y otros añadidos en lo que se llama comorbilidades múltiples que suelen dificultar el tratamiento y suelen suponer una complicación a lo largo de la evolución de la enfermedad.