Científicos taiwaneses han publicado un estudio recientemente que concluye que la sensibilidad a la insulina está asociada con el desempeño neurocognitivo en pacientes eutímicos con trastorno bipolar. Aunque los mecanismos subyacentes siguen sin estar claros, las intervenciones para mejorar la sensibilidad a la insulina podrían mejorar potencialmente el resultado funcional de esta patología.
El rendimiento neurocognitivo es un factor importante relacionado con el pronóstico y el resultado funcional en pacientes con trastorno bipolar. La presencia de deterioro neurocognitivo se asocia con una mayor discapacidad y se ha propuesto el deterioro cognitivo como un marcador de neurodegeneración en esta patología. Los pacientes con trastorno bipolar tienen un deterioro cognitivo significativo, especialmente en términos de función ejecutiva, atención, memoria de trabajo, velocidad, tiempo de reacción y memoria verbal y visual. Y en pacientes de larga duración que se encuentran en un estado eutímico, persisten las dificultades neurocognitivas.
En estudios anteriores se había informado también de una prevalencia de síndrome metabólico del 30% al 50% en pacientes con trastorno bipolar, que fue mayor que en la población general. Otros estudios indicaron que del 8% al 17% de los pacientes con trastorno bipolar tienen hiperglucemia y diabetes tipo 2, del 17% al 36% tienen un nivel alto de triglicéridos, del 20% al 23% tienen un nivel bajo de colesterol unido a lipoproteínas de alta densidad, 36% al 49% tiene una circunferencia de cintura grande y del 29% al 39% tiene hipertensión arterial. Además, existe una creciente evidencia que sugiere que un metabolismo alterado de la glucosa modera el curso de la enfermedad y los resultados del tratamiento en la enfermedad.
Dado que las alteraciones metabólicas están asociadas con déficits neurocognitivos, los investigadores plantearon la hipótesis de que la sensibilidad a la insulina podría estar potencialmente asociada con la trayectoria neurocognitiva en la fase eutímica del trastorno bipolar. El objetivo del estudio fue medir las diferencias en la sensibilidad a la insulina y la función ejecutiva entre pacientes con trastorno bipolar eutímica y controles sanos, y examinaron los posibles efectos de interacción de la resistencia a la insulina sobre la función ejecutiva en estos pacientes. Para ello se reclutaron a 62 pacientes que recibieron tratamiento con estabilizadores del estado de ánimo y 62 controles sanos, de igual edad, sexo e índice de masa corporal.
Los resultados publicados en la revista de Cambridge CNS Spectrums, indicaron que el valor de la resistencia a la insulina evaluado a través del modelo de homeostasis HOMA-IR en los pacientes con trastorno bipolar fue significativamente mayor que en los controles sanos. Además, con respecto a la función ejecutiva, los pacientes con trastorno bipolar se desempeñaron significativamente peor que los sujetos de control. El efecto de interacción entre el diagnóstico de trastorno bipolar y el valor de HOMA-IR -resistencia a la insulina- sobre los errores de la función ejecutiva fueron significativos, y los análisis posteriores mostraron que las capacidades cognitivas eran peores en los pacientes con trastorno bipolar con una resistencia a la insulina más alta.
Los investigadores afirman que se requiere un estudio adicional sobre cómo la mejora de la señalización de la insulina cerebral sería beneficioso para el tratamiento de los déficits metabólicos y cognitivos en el trastorno bipolar. En conjunto, los resultados indicaron que la resistencia a la insulina podría desempeñar un papel clave en el déficit cognitivo en el trastorno bipolar. Por lo tanto, los medicamentos o terapias aprobados para tratar la resistencia a la insulina pueden ayudar a tratar los síntomas del estado de ánimo y neurocognitivos en el trastorno bipolar.