Investigadores de la Escuela de Medicina de Yale, en New Haven en Connecticut (EEUU), han identificado neuromarcadores del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) en niños y un posible papel para el aprendizaje automático de neuroimagen que ayudaría con el diagnóstico, la planificación del tratamiento y la vigilancia del trastorno.
El TDAH es uno de los trastornos del desarrollo neurológico más comunes en la infancia. Los niños con este trastorno pueden tener problemas para prestar atención y controlar comportamientos impulsivos, o pueden ser demasiado activos.
Para el estudio se han utilizado datos de imágenes cerebrales de niños con y sin TDAH, identificaron diferencias en la estructura y la actividad del cerebro en niños con TDAH que podrían servir como neuromarcadores para el trastorno. Utilizaron datos del Estudio de Desarrollo Cognitivo del Cerebro Adolescente (ABCD), que incluye a casi 12,000 niños de todo Estados Unidos. Los participantes se unieron al estudio a los 9 o 10 años y los investigadores continuarán rastreando su desarrollo biológico y conductual hasta la edad adulta joven, lo que arrojará nuevos datos en los próximos años.
En los pacientes con TDAH, los investigadores observaron una conectividad anormal en las redes cerebrales involucradas en el procesamiento de la memoria y el procesamiento auditivo, un adelgazamiento de la corteza cerebral y cambios microestructurales significativos en la materia blanca, especialmente en el lóbulo frontal del cerebro.
El lóbulo frontal es el área del cerebro involucrada en el gobierno de la impulsividad y la atención o la falta de ella, dos de los principales síntomas del TDAH. Los datos de resonancia magnética eran lo suficientemente significativos como para que pudieran usarse como entrada para modelos de aprendizaje automático para predecir un diagnóstico de TDAH. El aprendizaje automático, un tipo de inteligencia artificial, permite analizar grandes cantidades de datos de resonancia magnética.
Según los investigadores, el estudio subraya que el TDAH es un trastorno neurológico con manifestaciones neuroestructurales y funcionales en el cerebro, no solo un síndrome de comportamiento puramente externalizado. Las imágenes de resonancia magnética objetivas del cerebro pueden ayudar a identificar claramente a los niños afectados por este trastorno.