Un equipo internacional de investigadores ha descubierto que las personas con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) tienen anomalías cerebrales específicas de este trastorno, y anomalías funcionales y estructurales diferentes en comparación con personas con trastorno obsesivo compulsivo (TOC). El metanálisis de diferentes estudios de imágenes del cerebro mostró que los pacientes con TDAH tienen las áreas prefrontal e insular más pequeñas y con menor actividad, mientras que en los pacientes con TOC dichas áreas cerebrales son más grandes y activas y, de hecho, pueden estar peor reguladas por la corteza prefrontal medial. El estudio ha sido publicado en la revista JAMA Psychiatry.
Liderados por la Dra. Katya Rubia, del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencias, del King’s College, en Londres, Reino Unido, los investigadores señalan que «existen biomarcadores neuroestructurales y neurofuncionales estriados y frontales distintivos para ambos trastornos, que pueden tener implicaciones para el diagnóstico y para un tratamiento diferencial en el futuro«. Además de ofrecer la posibilidad de realizar un diagnóstico diferente entre el TDAH y el TOC, «los biomarcadores neurofuncionales específicos de estos trastornos son además dianas terapéuticas útiles de fármacos dirigidos a dichas áreas o para tratamientos no farmacológicos mediadas por dichas áreas», aseguran.
Para examinar las anomalías estructurales y funcionales en pacientes con TDAH y TOC, el equipo llevó a cabo una búsqueda bibliográfica en las bases de datos PubMed, Science Direct, Web of Knowledge y Scopus sobre estudios de resonancia magnética funcional (fMRI) y morfometría cerebral total basada en vóxel (VBM) en niños y en adultos con estos trastornos y en individuos controles sin la enfermedad. Los investigadores realizaron un metanálisis mediante vóxel del volumen total de sustancia gris cerebral para evaluar diferencias mediante la fMRI entre TDAH y TOC utilizando mapeo-d basado en Seed. Se evaluaron las anomalías estructurales y funcionales regionales en todos los pacientes. Después hicieron una comparación cuantitativa entre dichas áreas y las áreas correspondientes en los controles.
El análisis reveló que los pacientes con TDAH tenían anomalías estructurales y funcionales multimodales en la ínsula/ganglios basales bilaterales derechos e izquierdos con disminución significativa del volumen y de la actividad de la sustancia gris en comparación con los pacientes con TOC y los controles. Por el contrario, los pacientes con TOC presentaban un aumento de volumen y de actividad en los ganglios basales e ínsula. En pacientes con TDAH, se observó una actividad baja específica de trastorno en la corteza prefrontal ventrolateral y en áreas relacionadas mientras que en los pacientes con TOC se observaron descensos específicos de trastorno en la estructura y en la actividad en la corteza prefrontal medial y en el área del cíngulo anterior rostral y dorsal. Los investigadores observaron también que ambos grupos de pacientes tenían menos volumen de la sustancia gris en la corteza prefrontal ventromedial en comparación con los individuos sin ninguna enfermedad