El 80% de kis indigentes sufren una enfermedad mental según el Estudio de Salud Mental en las Personas sin Hogar de la ciudad de Murcia. Los datos del informe realizados en esta ciudad son extrapolables a los de otras ciudades de nuestro país, puesto que anteriores investigaciones reflejan similares resultados. La mitad de los enfermos presentan una patología mental grave como trastornos psicóticos, trastorno afectivos o trastornos de personalidad.
Casi 200 personas sin hogar que pernoctan en la mayor parte de los casos en albergues fueron evaluadas para determinar hasta qué punto están afectadas por trastornos mentales y consumo de tóxicos. Los datos recogidos entre enero y junio de 2013 revelan que las enfermedades más comunes son trastornos psicóticos (17%), dependencia al alcohol (13%), depresiones y trastornos de personalidad. Para diagnosticarlas los participantes han pasado por una entrevista neuropsiquiátrica internacional como instrumento de diagnóstico y también una entrevista psiquiátrica, además de cuestionarios básicos.
Amanda Trigo, psiquiatra y coordinadora del proyecto explica que gran parte de estas enfermedades se convierten en crónicas. «Con un tratamiento, la persona puede estar estable y así se podría iniciar un proceso de rehabilitación psicosocial aunque necesitarían medicación a largo plazo y el problema de esta población es que se mueven de un lugar a otro, no han tenido contacto anterior con psiquiatría y además, están muy deteriorados y les cuesta mucho trabajo llegar a Salud Mental, por lo que la mayoría no reciben tratamiento», apunta la experta.
Las personas sin hogar o bien sufren esta patología antes de perder su casa y llegar a esa situación como consecuencia de su enfermedad o bien la desarrollan una vez que están en la calle al generarles un estrés y ansiedad que desemboca en estos trastornos. El objetivo del estudio más allá de conocer la realidad de este sector, es diseñar propuestas de intervención para poder ofrecer a los enfermos un tratamiento adaptado a sus necesidades.