Tired man after a very long day
Un estudio, publicado en Frontiers in Nutrition, asocia el aumento de la ingesta de fibra dietética se asocia con una menor incidencia de migraña. La migraña es una cefalea primaria altamente incapacitante, que provoca más discapacidades que todas las demás enfermedades neurológicas combinadas. Se estima que la tasa de prevalencia mundial es de 15% al 18%, lo que genera una gran carga para las personas, las familias y los sistemas de atención de la salud.
El objetivo de este estudio fue determinar la relación entre la ingesta de fibra dietética y la migraña. Los investigadores examinaron la asociación entre la ingesta de fibra dietética y la prevalencia de dolor de cabeza intenso o migraña mediante un estudio transversal que involucró a 12.710 participantes de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (1999 a 2004). La incidencia global de cefalea intensa o migraña en el estudio fue del 19,9%.
Según las conclusiones de la investigación, se observó una asociación inversa significativa entre la ingesta de fibra dietética y el dolor de cabeza intenso o la migraña: por cada aumento de 10 g/día en la ingesta de fibra dietética, la prevalencia de dolor de cabeza severo o migraña disminuyó en un 11%.
La fibra dietética está compuesta por polímeros de carbohidratos, que no pueden digerirse ni absorberse en los intestinos humanos, pero ingresan al intestino grueso y son fermentados por la microbiota intestinal. Los alimentos ricos en fibras dietéticas incluyen frutas, verduras, cereales integrales, tubérculos y legumbres.
Cada vez hay más pruebas de que la fibra dietética desempeña un papel en la reducción de la mortalidad y las enfermedades crónicas, como las enfermedades cardiovasculares y la diabetes mellitus tipo 2. Además, la fibra dietética tiene la capacidad de regular el microbioma intestinal.
Investigaciones recientes sugieren una relación bidireccional entre la microbiota intestinal y el cerebro, lo que se conoce como el concepto de eje intestino-cerebro. Algunos investigadores han especulado que la interacción entre el intestino y el cerebro puede provocar problemas relacionados con la neurología. Aunque no se ha explorado el mecanismo de la influencia del eje intestino-cerebro en la migraña, se ha sugerido que el aumento de la permeabilidad intestinal puede conducir a la llegada de sustancias proinflamatorias al sistema vascular del trigémino, lo que lleva a la aparición de la migraña.
Según las conclusiones de los autores, aumentar la ingesta de alimentos ricos en fibra podría proteger contra el dolor de cabeza intenso o la migraña.