My bed is my the best friend
Un equipo de científicos ha descrito una serie de patrones comunes de trastornos del sueño e irregularidades en los ritmos diarios de descanso y actividad de pacientes con trastorno del espectro esquizofrénico. Gracias a un estudio descubrieron que los pacientes con TES en hospitales psiquiátricos y los que trataban su enfermedad en centros ambulatorios tenían patrones de sueño erráticos, transiciones desreguladas entre los ciclos de sueño y vigilia y rutinas diarias muy rígidas que predecían un empeoramiento de los síntomas del TES y tenían relación con una peor calidad de vida.
En el estudio de 250 participantes, entre ellos casi 150 pacientes de TES residenciales y ambulatorios que representan una de las cohortes más grandes entre los estudios publicados sobre el sueño y el TES, los investigadores midieron la actividad y el descanso de los participantes durante el día y la noche pidiéndoles que llevaran una pulsera que detecta el movimiento.
Los investigadores no realizaron un seguimiento de las ondas cerebrales durante el sueño ni distinguieron entre las distintas fases del sueño, algo que sí harán en futuros estudios. Pese a ello los resultados fueron contundentes. Sin embargo, se descubrió que tanto los pacientes residenciales como los ambulatorios con TES tendían a tener menos horas activas durante el día y pasaban más tiempo durmiendo o descansando pasivamente que los controles sanos. Además, los pacientes residenciales tenían un sueño más fragmentado y transiciones más bruscas entre el descanso y la actividad en comparación con el grupo ambulatorio. Los pacientes residenciales también mostraban ritmos más rígidos de descanso y actividad diarios que los pacientes ambulatorios y esas medidas se correlacionaban con un mayor grado de síntomas negativos de salud mental, incluida una menor motivación para interactuar con los demás y una capacidad menor de sentir placer.