El doctor Pedro Luis Pérez Castro asegura que un tercio de la población sufre las consecuencias de un mal diagnóstico y un ineficaz tratamiento del bruxismo y ha editado un monográfico divulgativo pero con vocación de manual científico para odontólogos y estomatólogos. El doctor explica que el bruxismo «va más allá de rechinar los dientes por la noche»: se trata de una alteración de la función masticadora del sistema estomatognático, esto es, el conjunto de órganos y tejidos que permiten funciones fisiológicas esenciales como comer, hablar, pronunciar, sonreír e incluso respirar. Cuando se alteran los patrones de funcionamiento de la boca, puede aparecer el bruxismo, que provoca cefaleas por la mañana, sensación de cansancio desde primera hora el día y dolores musculares como síntomas más evidentes.
Es esencial un diagnóstico precoz, bien cuando son los familiares quienes detectan un mal hábito nocturno o bien porque el mismo paciente identifique algunos de los síntomas anteriores. En ese caso, el dentista hace una exploración clínica, revisa la historia médica del paciente y «se lleva la boca de la persona al laboratorio», donde se hace un molde de su dentadura y se examina al detalle los signos de desgaste dental ocasionados por contactos anómalos entre las piezas dentales. Es entonces cuando el especialista decide si hay que colocar una ortodoncia o bien la conocida como «placa de descarga» pero hecha a medida para cada paciente y con un material verificado por las autoridades sanitarias y con materiales permitidos en la Unión Europea (UE). También puede llegar un momento en el que el desgaste dental sea tal que el médico deba realizar una rehabilitación completa con fundas y coronas las piezas para reponer todo el esmalte que se ha perdido en una boca destruida.
Pero, ¿cuáles son los motivos? El doctor apunta que todos los pacientes bruxistas tienen un componente de estrés, ansiedad, angustia, por lo que una vez iniciado el tratamiento dental resulta conveniente que el odontólogo estudie la necesidad de complementarlo con tratamientos psicológicos para mejorar los hábitos del paciente. Por ello, Pérez de Castro ha considerado necesario elaborar este monográfico que contiene imágenes clínicas y pequeños vídeos explicativos y está escrito en un lenguaje divulgativo pero sin perder el rigor científico de un texto realizado por un profesional dirigido a pacientes, alumnos y odontólogos.