Una técnica para ejercitar la conciencia plena podría ser útil para ayudar a tratar los diferentes tipos de adicciones y, especialmente, para mejorar la prevención de recaídas. El mindfulness está ganando cada vez más popularidad y en los últimos años ha aumentado la evidencia de que esta técnica es capaz de inducir cambios importantes en la actividad cerebral y en el epigenoma humano, lo que ayuda a mejorar los síntomas de algunas enfermedades, según han demostrado los estudios dirigidos por Jon Kabat-Zinn, fundador y director de la Clínica de Reducción del Estrés y del Centro de Mindfulness y Medicina de la Universidad de Massachusets, en Estados Unidos.
Las técnicas de mindfulness aparecieron en occidente a finales de los años setenta del siglo pasado, dentro del mundo de la psicología y la psiquiatría, con programas para la reeducación del estrés. Parten de técnicas budistas como la meditación, pero no se adhiere a ningún marco cultural ni religioso. La atención consciente o plena es el ingrediente fundamental de las técnicas de meditación, y a su vez, la meditación es el mejor modo de adquirir esta habilidad.
Una de las características de personalidad que suele acompañar a las personas adictas es su bajo control emocional, es decir, les cuesta manejar emociones negativas como la culpa, la rabia, la tristeza, el asco etc., por lo que la manera de salir de ellas es evadiéndose o anestesiándose a través de su adicción (droga o comportamiento). Al consumir la droga o ejecutar la conducta adictiva disminuye la percepción de malestar o el dolor psíquico que estas emociones les provoca, pero como esta disminución del malestar es por muy corto espacio de tiempo, la conducta se repite cada vez con mayor frecuencia. Las adicciones (drogodependencia y conductas adictivas) se consideran una enfermedad crónica del cerebro, con tendencia a la recaída, caracterizada por la búsqueda y el uso compulsivo de drogas (o conductas determinadas) a pesar de las consecuencias nocivas. Ello es debido a que la droga (o conducta adictiva) produce una gratificación inmediata porque activan en mayor o menor medida las áreas cerebrales asociadas a la sensación de placer, dejando en un casi imperceptible plano la realidad de las consecuencias.
En el adicto, el deseo funciona de la siguiente manera: entran ganas compulsivas de consumir, se produce una atención selectiva de carácter automático sobre los efectos beneficiosos que se derivan del consumo y una enajenación sobre los efectos perniciosos. Es decir, en el adicto existe un déficit de atención consciente durante los episodios de deseo, lo cual actúa como un potente factor de riesgo en el consumo. Mindfulness, mediante técnicas psicoterapéuticas que facilitan la puesta en marcha de un proceso de focalización atencional selectiva consciente, es un método adecuado, dentro del proceso multidisciplinar que los trastornos adictivos requieren para su rehabilitación. Entre sus objetivos, la práctica de mindfulness nos permite detectar los contenidos de los productos de la mente en el momento presente, con una actitud de aceptación de los mismos, tal y como estos son.
Las técnicas de atención consciente han demostrado en estudios preliminares ser efectivas en el tratamiento de las adicciones en general y particularmente en el tabaquismo, el alcoholismo, otras drogas, los desórdenes alimenticios etc. En un metaanálisis de la universidad de Boston, los investigadores examinaron el grado de efectividad que estas técnicas habían tenido contra la ansiedad y depresión, concluyendo que se alcanzaron grandes beneficios como consecuencia de que las personas que meditaban aprendían cómo trabajar mejor en medio de las dificultades en general. Este metaanálisis es de gran importancia porque, como sabemos, las personas adictas sufren, junto a su adicción, de gran ansiedad y en la gran mayoría de los casos de depresión, que en unas ocasiones están causados por la adicción y en otros, es la adicción la causante de ellos. Pero en todos los casos, toda técnica que posibilite la disminución de la ansiedad y de la depresión va a permitir mucha mayor permeabilidad y absorción en la aplicación del conjunto de técnicas necesarias para la rehabilitación.